La industria de la construcción ha sido durante mucho tiempo una gran contribuyente a la huella de carbono global, pero la marea está cambiando gracias al creciente interés en el medio ambiente.
En Colombia, la construcción sostenible ha tomado cada vez más fuerza y se están desarrollando propuestas inmobiliarias que adoptan mecanismos para minimizar el impacto ambiental.
Una muestra de ello es que el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia tiene una sección en su sitio web dedicada a la construcción sostenible. En esta página podrás encontrar información relevante sobre el tema; estrategias como el uso de materiales reciclables y renovables, el uso eficiente de la energía y el recurso hídrico, así como la implementación de diseños de bioarquitectura y técnicas de construcción más eficientes.
A grandes rasgos, es notable cómo la industria de la construcción colombiana se está abriendo paso en el uso de prácticas “más verdes”. Por ejemplo, en lo que se refiere a medidas para reducir la cantidad de residuos generados por la construcción, algunas constructoras le están apostando al uso de materiales reciclados y la reutilización de materiales que tradicionalmente terminaban desechados. También se están realizando esfuerzos para mejorar la eficiencia del agua y reducir el consumo de energía en la construcción y el mantenimiento de edificios.
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Bueno para el medio ambiente y bueno para la economía
La construcción sostenible no solo está beneficiando al medio ambiente. Actualmente existen estímulos económicos y evidencias que nos muestran que apostar por el medio ambiente es una práctica rentable a corto y largo plazo.
Según un estudio liderado por el Consejo Colombiano de Construcción Sostenible (CCCS) y basado en proyectos con certificación LEED, las edificaciones sostenibles han logrado ahorros en energía de hasta 70% con un sobrecosto promedio de 6% relativo a las inversiones adicionales en energía, en comparación con una edificación tradicional. Además, la construcción sostenible puede generar mayor valor a sus dueños y tener un efecto positivo en la salud, el bienestar y la felicidad de las personas.
También hay incentivos económicos para la construcción sostenible en Colombia. Por ejemplo, existen créditos verdes y tasas preferenciales para los inversionistas y sus clientes. Además, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible ha implementado alivios tributarios para quienes se acojan a los preceptos sostenibles, como la exención de impuestos definidos en el marco del artículo 255 del Estatuto Tributario Nacional para edificaciones que se encuentren certificadas en su fase de diseño por un ente certificador acreditado en construcción sostenible de orden nacional o internacional.
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¿En Colombia vamos por buen camino hacia la construcción sostenible?
Aunque la construcción sostenible aún no es la norma en Colombia, existe un creciente interés en adoptar estas prácticas. La implementación de políticas gubernamentales y la educación en sostenibilidad son clave para acelerar la transición hacia una industria de la construcción más verde.
¿Qué opinas sobre este tema? ¿Crees que la industria de la construcción debería adoptar prácticas más sostenibles en el futuro? Déjanos saber tus opiniones en la sección de comentarios.